Es complicado

Mi cabeza es una enredadera mental,
miles de suposiciones salen disparados hacia cualquier punto.
Desbloqueo la pantalla del celular, lo he revisado ya un montón de veces, mas sigo nerviosa, esperando que hayas respondido.

No hay notificaciones, ni una ventana que emerja de pronto y me enseñe tu nombre con algunas líneas debajo, solo el mismo fondo de pantalla y una ilusión que se devuelve por donde vino. Presiono de nuevo el botón y la pantalla se vuelve negra.

Talvés estoy ansiosa, supongo que demasiado, mi comportamiento no tiene excusa y mi culpa de conciencia aminora sólo por segundos, y me viene esta pregunta
¿por qué el deseo de que me hables?
Miro de nuevo el reflejo que produce la pantalla del celular con el ambiente, esperando que parpadee ese bombillito de color verde, nada.
Desbloqueo el aparato de nuevo, me deslizo entre los escritorios, entro al menú y pongo un juego con la esperanza de dislocar un poco estos pensamientos.

 Es simplemente  absurdo, me enojo... si, me enojo contigo porque me dejas con esta espera incesante y yo, con una paciencia tan finita. Decido mejor dejarlo dentro de mi bolso, me pongo a conversar con mis compañeros y así desahogo un poco la presión que yo misma estoy ejerciendo.
¿por qué no me responde? Será que está ocupado, si, puede que sea eso y yo halandome los moños imaginando tonterías, pero ¿por que me importa tanto? No debería preocuparme si quiera por ello... el no se supone deba existir, su esencia es todo contra lo que he pregonado y aqui estoy, esperandolo.

Me asalta la sensación de remordimiento, no debería estar haciendo esto, pero las memorias... llegan una y otra vez a mi cabeza, me gusta cómo me hace sentir el revivirlas.
"no seas estupida" me reprendo, se que esto es solo un juego, es solo algo efimero, sin embargo, quiero disfrutarlo cuanto pueda.

Llego a casa, me tiro en la cama, ni siquiera recordaba el cellular, fui a buscarlo a mi bolso, y creo que mi rostro se ilumino, respondiste, solo dos lineas, pero fueron suficientes  para satisfacer mi ansiedad. Me muerdo el labio inferior, no quiero responderle, deseo castigarle por el estres por el que tuve que atravesar y creo que sera lo mejor, bloqueo la pantalla a lo que mi esposo me rodea con sus brazos desde atrás.

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